miércoles, 17 de junio de 2009

Julio vivía en un barco

Julio vivía en un barco en el puerto de Barcelona.
Tenía ese barco, una novia, una perra y muchos amigos; algunos enemigos también, claro.
Cuando estaba en Asturias vivía en casa de una amiga que sentía como su casa.
Era lo suficientemente adulto como para saber lo que quería en la vida y lo suficientemente joven como para tener muchos proyectos.
Trabajaba de patrón de yates pero seguramente habría acabado siendo profesor.
Como le gustaba estudiar contaba en su haber ya con varias carreras universitarias, como le gustaba escribir gestionaba varios blogs.
Era un conductor prudente y muy muy tranquilo con el record de hacer ¡en 22 horas! el trayecto Barcelona-Asturias
Julio murió el miércoles 10 de Junio de 2009 mientras venía hacia Asturias con su novia. Dicen que a mitad de camino un coche grande con un conductor que había bebido demasiado se les echó encima. Julio se quedó ahí, en esa parte del camino; a su novia tuvieron que excarcelarla los bomberos de entre los hierros del coche para llevarla al hospital. Nos enteramos hace 2 días.
No llegaba, no llegaba, al teléfono no contestaba nadie, era muy raro, Julio no era así ¿Que estaría pasando? Primero su amiga asturiana indagó con la Guardia Civil sin resultados, luego lo intentó con la Policía Nacional. Finalmente internet y una llamada al puerto de Barcelona dieron fruto: Julio estaba muerto y su novia en el hospital.
Shock, susto grande, tristeza, recuerdos...todo se acumula de repente en la mente cuando te llega la noticia de que ya no está aquí, que no vive, que no hay más renglones por escribir.

Por eso, para tí, Julio, desde dejalosirconamor queremos decirte :

"Ahora que ya no estás, ahora que te has ido, te deseo lo mejor en tu viaje sea a donde sea que te conduzca la aventura de no estar vivo. Me alegro de haberte conocido y que sepas que los que aquí seguimos y te conocemos te recordaremos y vivirás para siempre en nuestra memoria.

Buena suerte y buen camino.

Para Julio López Rodríguez. In memoriam

viernes, 12 de junio de 2009

sábado, 6 de junio de 2009

Mi abuela murió cuando yo era pequeña

Mi abuela murió cuando yo era pequeña.

Recuerdo que yo dormía con ella normalmente.
Aquella noche desperté y mi abuela se había caído para atrás en la cama y, aunque no se movía, ni decía nada, tenía los ojos abiertos.
Fuí a buscar a mis padres. Vi a mi madre abrazarla llorando y decir:" mamá mamá mamá" como en un lamento eterno.
Me acostaron en la habitación de mis padre pero ellos esa noche no durmieron.
A la mañana siguiente vinieron a despertarme y me preguntaron "¿Sabes lo que ha pasado?" Yo contesté " Sí, se ha muerto la abuelita" "¿Como lo sabes?" preguntaron de nuevo "Porque anoche cuando os fuí a buscar ella ya estaba muerta". Me dijeron "No, aún no lo estaba, murió después" Y yo pensé "qué raro, ¿porqué me engañan? ¿habrá pasado algo malo? ¿pensarán que soy tonta?" Y entonces me asusté.

En mi país los niños no participaban entonces de la muerte y el duelo así que, esa mañana, me llevaron a casa de una vecina y ya no volví a mi casa hasta 2 días después.

No sé si habría querido ir al funeral o al entierro entonces pero ahora, desde mi mirada de adulta, sé que me habría gustado que me permitieran participar, que alguien me explicara porqué no podía poner música, porqué mi madre se vistió de negro, porqué durante un tiempo de mi casa se esfumó la alegría, qué era eso de morirse y porqué me cambié de habitación y me daba miedo dormir en la cama en la que antes dormía con mi abuelita.


Alba